El BNG pide a la Xunta que adopte medidas urgentes para frenar la plaga de rata topo

La diputada del BNG, Montse Valcárcel, ha reclamado a la Xunta de Galicia que adopte medidas urgentes para frenar la plaga de rata topo, que vuelve a convertirse en un problema de gran magnitud en el sur y este de la provincia de Lugo, donde afecta ya a más de 8.000 hectáreas de terrenos agrarios.
Valcárcel criticó duramente la gestión del Gobierno gallego, señalando que la orden de ayudas puesta en marcha en 2023 fue “mísera” y “claramente insuficiente para atender las necesidades del sector afectado”. Según explicó, los pagos reales apenas alcanzaron 93 euros por hectárea, muy lejos de los 300 euros anunciados, lo que no permitió compensar los graves daños provocados por esta plaga.
Asimismo, la diputada nacionalista cuestionó la efectividad de las medidas propuestas por la Xunta, que —a su juicio— se limitan a “la colocación de trampas, un método poco eficaz para un control real de la población de rata topo”.
En esta línea, Valcárcel subrayó la importancia de seguir apoyando las investigaciones que se están llevando a cabo en el campus de Lugo de la Universidad de Santiago de Compostela (USC), donde se han logrado avances significativos en el uso de productos naturales como estrategia de lucha biológica. Estos productos, explicó, “imitan las señales químicas de los depredadores y ayudan a reducir la capacidad reproductiva de la rata topo, lo que representa un paso clave hacia un control más eficaz de esta plaga”.
La diputada también pidió al Gobierno gallego que incremente el apoyo a estas investigaciones y destine más recursos tanto para la lucha contra la plaga como para establecer líneas de ayuda adecuadas que compensen a los ganaderos por las pérdidas sufridas en los últimos años.
El BNG presentó una iniciativa parlamentaria en la que solicitaba a la Xunta que implementase medidas efectivas de control y abriese una nueva línea de ayudas en 2025 para cubrir los daños ocasionados en los terrenos agrarios. Sin embargo, la propuesta fue rechazada por el Partido Popular.
La rata topo es un roedor autóctono de las zonas de montaña que se ha convertido en una plaga en Galicia desde 2009, cuando se detectaron los primeros focos. Su proliferación ha provocado graves perjuicios en explotaciones ganaderas, especialmente en municipios como As Nogais, Baralla, Cervantes, Folgoso do Courel, Navia de Suarna, Pedrafita do Cebreiro, Samos y Triacastela. En estas zonas, los daños afectan tanto a la calidad de los pastos como a la producción de silo, que se ve contaminado con tierra e impurezas, obligando a los ganaderos a comprar forrajes de otras zonas y elevando considerablemente los costes de producción.