El Ayuntamiento de Láncara llevará al Pleno una propuesta de la Alcaldía en la que se solicita formalmente al Servizo Galego de Saúde la cobertura inmediata de la plaza de pediatra en el centro de salud de A Pobra de San Xiao, vacante desde el pasado 1 de junio.
La moción también reclama la incorporación de un o una profesional de enfermería pediátrica, siguiendo el modelo aplicado ya en otros municipios de la provincia de Lugo, con el objetivo de garantizar una atención sanitaria de calidad para la población infantil del municipio.
La iniciativa surgió tras una reunión urgente celebrada el pasado jueves, 3 de julio, en el Salón de Plenos del consistorio, a la que acudieron alrededor de 25 personas, en su mayoría madres y padres de los 156 menores adscritos al centro de salud, que representan más del 70 % de los niños y niñas menores de 14 años que residen en el municipio.
Durante el encuentro, las familias afectadas acordaron iniciar una recogida de firmas y apoyar la elaboración de la propuesta institucional que será presentada al Pleno municipal para su debate y votación.
El alcalde en funciones, Pablo Rivera Capón, acompañado por el concejal de Régimen Interior y Hacienda Local, Juan José Díaz, agradeció la implicación de la vecindad y destacó que “la defensa de la sanidad pública no entiende de colores políticos, sino de derechos fundamentales de la ciudadanía, como es el acceso a la atención pediátrica en el rural”. Rivera subrayó también que esta carencia afecta directamente a la calidad de vida de las familias y representa un obstáculo más para fijar población en los municipios del interior.
La moción que se llevará al Pleno recoge, entre otras medidas, la exigencia de que el Sergas garantice la presencia de una pediatra al menos dos días a la semana y que se dote de los medios necesarios para evitar que situaciones como la actual vuelvan a repetirse, consolidando un servicio estable y continuo.
El Ayuntamiento de Láncara también tiene previsto remitir a la Consellería de Sanidade las firmas recogidas, como muestra del rechazo social ante la falta de cobertura y de la unidad vecinal en defensa de una sanidad pública de proximidad, con equidad territorial y con una atención digna para la infancia del rural gallego.