Sonia Romay, gerente de Facenda Farruquiño: “Apreciamos mucho el buen hacer y nuestro producto es de calidad”
Jessica Fernández
¿Cómo surge la idea de crear esta empresa?
Facenda Farruquiño es una pequeña empresa de alimentación y elaboración que nace en 2016 a partir de una ganadería familiar con el fin de comercializar y poner en valor nuestros animales criados en casa, en un momento en el que la industrialización de las carnes que se comercializaban hacía difícil la existencia de ganaderías que tenían procesos de producción lenta y cuidada, como la nuestra. Por eso decidimos crear Facenda Farruquiño, para tener nuestra propia marca y darle valor a lo bien hecho. En esencia, somos la tercera generación de una familia de ganaderos productores de ganado vacuno y porcino.
¿Cómo es la producción de los productos?
En Facenda Farruquiño apreciamos mucho el buen hacer y la sostenibilidad de antes. Es por eso que, después de la jubilación de nuestros antecesores, aprovechamos su legado para elaborar un embutido en A Fonsagrada a partir de nuestra materia prima, que nosotros calificamos como excelente. Los cerdos criados en la ganadería Facenda Farruquiño, en Cospeito, reciben un trato muy cuidado, desde que van al matadero hasta el momento de trabajar la materia prima. Cuidamos mucho el trato y manejo en los desplazamientos hasta A Fonsagrada, donde se realiza el proceso artesanal y su curación para dar salida a ese embutido tan especial.
¿Qué productos ofrecen?
Ofrecemos una cesta de la compra integral, desde productos del agro gallego seleccionados, además de los elaborados de nuestra propia marca, como los salados del cerdo, cacherras, lacón, soá y nuestro embutido hecho y curado en A Fonsagrada. Trabajamos muy bien los productos de primeras marcas, los de toda la vida, con muy buenos precios y ofertas, algo que nuestros clientes valoran mucho. Ofrecemos de todo sin tener que moverse mucho, ya que hoy en día no hay mucho tiempo. Lo que buscamos es ofrecer al cliente una cesta completa, productos frescos, carnicería de primera, fruta, congelados…
¿Cómo es el trato con los proveedores?
La verdad es que tenemos un número importante de proveedores de los que seleccionamos lo mejor y normalmente compramos siempre a los mismos. Somos metódicos y trabajamos con mucho rigor. Siempre que es posible, damos preferencia a los proveedores locales.
¿Tienen más sedes en otros lugares? ¿Por qué?
Estamos en Burela, Abadín, Cospeito y Sarria, y además tenemos una línea de Autoventa con diferentes rutas por la provincia de Lugo.
¿Por qué son importantes estos lugares para un sitio como Sarria?
Siempre hemos tenido a Sarria como referente. Es una zona, para nosotros, referente en fuerza, en emprendimiento… es un pueblo que cuida y valora el mercado local, nosotros siempre respetamos y compartimos eso. Si nosotros mismos no somos capaces de apreciar y darle valor a lo nuestro, los demás tampoco, y siempre quisimos ponerlo en Sarria por nuestros principios. Además, aprecian el buen hacer. Creemos que pueden valorar nuestro embutido de A Fonsagrada que tiene una climatología ideal para el curado. En Sarria eso se valora porque son de tradición ganadera y de embutido. No queremos rivalizar con Sarria, pero queremos ofrecerles nuestro embutido de montaña.
¿Cómo es el trato con el cliente?
Nuestro modelo de negocio debe ir dirigido a ofrecer a la villa la posibilidad de recuperar los valores del comercio de siempre, en el que hay un producto seleccionado, cuidado y elegido por el tendero, como antes, que ibas a comprar un producto y el tendero tenía la mejor selección ya hecha. Valoramos el trato cercano con el cliente. Nosotros estamos especializados en el cliente tradicional que cocina para la familia y gestiona la economía del hogar. No queremos ofrecer mucha variedad como una gran superficie, somos más partidarios de seleccionar bien y lo bueno. También cuidamos mucho el precio, porque pensamos en la gente y valorar el trato con el cliente es empatizar, saber lo que quiere y cómo lo quiere sin tener que preguntar.
¿Qué expectativas de futuro tienen?
Pensamos que es un sector que está en continuo movimiento. No hay estancamiento, porque hay un mundo de posibilidades para avanzar. Hay muchas opciones para aprender y crecer, y está en continuo desarrollo. Además, aunque parezca que hay una brecha generacional en el sector, lo que es bueno siempre es bueno. Esta es la esencia de todo, lo que fue bueno tiene que seguir siendo bueno, habrá que darle forma y conducirlo a las necesidades actuales de la población. Nuestro objetivo es seguir creciendo, consolidar y estructurar nuestra empresa alrededor de nuestros pilares fundamentales: el equipo de trabajadores es nuestro pilar, por eso uno de los objetivos es consolidar el equipo de Farruquiños. Siempre sin olvidar nuestras raíces, nuestra ganadería, nuestra marca. Tenemos claro de dónde venimos y a quién nos debemos, fundamentalmente a los trabajadores que abren y cierran las tiendas cada día, que dan la cara, que ofrecen lo mejor de sí mismos para seguir mejorando.
