Vecinos y representantes del BNG protestaron frente al centro de salud de O Páramo por la situación sanitaria
La diputada nacionalista, Olalla Rodil, participó junto con militantes del BNG y vecindario de O Páramo en una concentración para denunciar la falta de personal facultativo en el centro de salud.
Según los datos del Instituto Gallego de Estadística (IGE) en el Páramelo viven 1.308 personas y el Centro de Salud cuenta actualmente con dos plazas de medicina de familia, una plaza de enfermería, una plaza de personal administrativo.
Así, el servicio de pediatría lo reciben en el centro de salud de Sarria, la donde deben desplazarse también a las urgencias (PAC) o en el de la Pobra de San Xiao. Sin embargo en este último solo pasa consulta los viernes.
“Desde hace meses solo se encuentra cubierta una de las plazas de médico que además está a punto de se jubilar”, explica la diputada nacionalista. La otra plaza se encuentra vacante, lo que deja el centro de salud con una médica buena parte de la semana, "pues el SERGAS no garantizador a cobertura de esa otra plaza a mayoría de los días", critica.
“El vecindario de O Páramo viene mostrando una importante preocupación por la merma del servicio sanitario al no contar con las dos plazas de médico cubiertas y por el futuro del propio centro de salud, ya que la única médica titular que continúa prestando asistencia sanitaria de manera estable prevé jubilarse a más tardar el próximo año”, denuncia Rodil.
“Desde el Bloque Nacionalista Galego compartimos la preocupación vecinal, pues situaciones semejantes vividas en otros ayuntamientos rurales demuestran que el gobierno del Partido Popular en la Xunta de Galicia no duda en dejar vacías y recortar plazas de médicas y médicos especialmente en localidades pequeñas, obligando la población a desplazarse la otras villas para recibir asistencia sanitaria”, sostuvo la diputada nacionalista.
Así, para el BNG es fundamental que servicios públicos esenciales como la sanidad y la educación se mantengan con la máxima calidad en todo el país, pero más aún en los ayuntamientos rurales, "pues el cierre o merma de estos no hace más que ahondar en la despoblación. No puede pregonarse el compromiso con el rural y luego convertir la vida de las personas que viven en él en una carrera de obstáculos a la hora de recibir prestaciones básicas, como la sanitaria", concluyó.